Quiñihual

Detuvo el indio su corcel de guerra
mirando a todos con altivo ceño.
Plantó un extremo de la lanza en tierra
con gesto torvo y ademán zahareño.

Y dijo el lenguaraz: “Hemos vencido”
y es nuestro ahora, tu nativo suelo.
“Serás esclavo, donde Rey has sido”.
Nada dijo el cacique miró al cielo.

Con las manos privadas en los grillos
Quiñihual el cacique meditaba…
Los blancos festejaban la victoria.

Y fue entonces: rompiendo los anillos
que alzóse el indio de la raza brava
y ante los blancos se mató con gloria!

Quiñihual, 1918

No hay comentarios: